Por: Eliana Marra
La música en los últimos tiempos demostró notables cambios. Con la tecnología como eje principal, la manera de escuchar y de hacer música ha marcado un antes y un después en esta importante rama del arte durante el siglo XXI. Habitualmente se relaciona a la tecnología con diferentes instrumentos que facilitan el manejo en la vida cotidiana, los placeres, hobbies o trabajos que atraviesan los seres humanos.
Tanto para los seguidores musicales como para los que se dedican a hacer música, las novedades que surgen en ese aspecto son muy importantes para su mejor desarrollo, para su mayor difusión, y también beneficia su crecimiento. Aunque la tecnología sea un gran atentado contra la creatividad del hombre, los aspectos positivos superan ampliamente los negativos en cuanto a su existencia y evolución en el tiempo.
Los mp3, los ipods, consolas musicales y muchos artículos más, desplazaron de forma casi total a los viejos instrumentos que se utilizaban tanto para hacer como para escuchar música y reproducirla en cualquier lugar donde nos encontremos.
La tecnología cuando es aplicada a la música siempre va a presentar ventajas y desventajas. Facilita los trabajos de edición, pero también no permite que la música se desenvuelva tal como debería hacerlo, ya que contando con una simple consola cualquier persona tiene la posibilidad de hacer música y en ese aspecto ya se perdería un poco el titulo de artista musical. Pero como el mundo está lleno de ventajas y desventajas, aquellos que estén interesados en esta rama tendrán la difícil tarea de saber combinar las faltas de tiempos con las habilidades y gustos musicales para lograr un buen resultado final.
